Muchas personas creen que el sobrepeso es hereditario, muchos otros piensan que ser gordo es algo que les tocó, algunos se les ha inculcado la idea de que siempre han sido gordos y que no podrán perder esos kilos demás, todos estos automensajes se convierten en saboteos internos que no te dejan salir del pozo. Y mientras más se piensa que no se podrá rebajar o lograr un peso ideal entonces más excusas nos dará esa forma de pensar para seguir comiendo esas galletas , tortas, papas fritas, refrescos y todo lo que le haga daño a nuestro organismo.
Sea cual sea el motivo es sólo una creencia y como ya lo sabes las creencias se pueden cambiar por otras que te sirvan mejor el día de hoy y que te hagan más feliz. Recuerda que tu puedes elegir que creer y que no creer.
El tener el peso ideal se logra definitivamente, no con dietas, ejercicios extremos o pasar hambre si no con la decisión de enseñarle a tu cuerpo lo que es bueno para él, sabiendo exactamente que es lo que tú quieres y utilizando los pensamientos correctos en todo momento.
Todo lo podemos solucionar reprogramando nuestros pensamientos e incluyendo pensamientos nuevos y frescos que nos den los resultados que de verdad queremos en nuestra vida, no sólo con respecto al peso sino en todos los aspectos de nuestra vida.
Una alimentación balanceada, una rutina de ejercicios acorde a la edad y una actitud más positivas hacia nosotros mismos es un buen inicio para mejorar la situación de nuestro peso. Pero lo más importante es lo que pensamos acerca de nosotros mismo, porque ésta es la válvula donde se encienden todas nuestras creencias, cuando logres atacar el problema en la raíz que lo produce éste desaparecerá para siempre, nuestros pensamientos acerca de nosotros son altamente poderosos y controlan nuestra vida.
Es altamente recomendable que tomes conciencia de que tus pensamientos son poderosos y que el uso que les das determina lo que te sucede en tu experiencia, abstente de pensar negativamente acerca de ti mismo, acerca de lo que comes y sobretodo acerca de tu cuerpo.
lunes, 13 de julio de 2009
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